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25 Oct

Hipertrofia adenoidea en niños

No hay nada más frustrante para un padre o una madre que recibir la noticia por parte del pediatra, del alergólogo o del otorrino que su hijo de 2, 3 o hasta 6 años no respira bien porque tiene “adenoides crecidas” o simplemente “adenoides”.

Las adenoides son masas de tejido linfoide (el mismo tejido del que se componen las amígdalas palatinas o comúnmente llamadas “anginas” en la garganta) que se encuentran en el sitio más profundo de la nariz, justo donde ésta se conecta con la parte superior de la faringe y donde el aire que respiramos inicia su recorrido hacia los pulmones. Éste tejido se encarga de funciones de defensa a través de diversos mecanismos que involucran a los famosos linfocitos B y T, así como a las células NK y múltiples sustancias que interactúan en los casos en los cuales una respuesta lo más rápidamente posible ante virus, bacterias y hongos es necesaria.

Sin embargo, aún cuando no se sabe cuál es la causa precisa las adenoides pueden crecer excesivamente ocasionando problemas. Y decimos que no se sabe con certeza la causa ya que se piensa en causas hereditarias, aberraciones del sistema inmunológico, exposiciones a infecciones, exposiciones ambientales o factores hormonales. A pesar de que las adenoides técnicamente forman parte del sistema de defensa ante virus, bacterias y hongos, cuando existen factores que propician la inflamación de éstas, se altera el mecanismo de defensa y su función se debilita. Los mismos agresores entonces tienen condiciones propicias para invadir y propiciar un círculo vicioso de crecimiento desordenado e inflamación.

El rápido crecimiento de las adenoides ocupa un pequeño espacio en forma de declive en el techo o parte más alta de la garganta, justo detrás de la nariz. Al hacerlo ocasiona bloqueo importante del aire obligando a los pequeños pacientes a abrir la boca para respirar. Además los conductos de ventilación que comparten los oídos y la nariz se encuentran en la cercanía de éste pequeño espacio ocupado por lo que otro de los problemas a menudo presentados son alteraciones del oído como disminución de la audición (sordera), o infecciones repetitivas del oído con dolor y a veces supuración. Es un problema frecuente entre los niños con prevalencia reportada hasta 34%.

¿Cómo sospechar la presencia de adenoides crecidas? A menudo los niños con éste problema tienen uno o más síntomas o signos como éstos:

Respiración constante por boca (boca abierta la mayoría del tiempo) labios resecos, respiración ruidosa o audible a distancia, ronquido nocturno, deja de respirar durante el sueño por períodos que duran varios segundos (apneas del sueño), escurrimiento nasal, infecciones repetidas de oído (más de 2 veces al año), sordera que puede manifestarse por distracción o falta de atención, alteraciones en el desarrollo de los dientes y los maxilares (carita de “ave” o de “pollito”).

A pesar de ser un problema frecuente, existe cierto consenso contrario entre los pediatras y los otorrinos y hasta dentro de las mismas especialidades. La controversia radica en ¿cuál es el tratamiento adecuado y cuándo realizarlo? Una idea frecuente y errónea es creer que las adenoides no se operan porque son “defensas” del paciente. Otra idea equivocada es que las adenoides van a desaparecer a los 12 años y el niño para ese entonces habrá crecido lo suficiente para que el bloqueo de la respiración ya no sea significativo. Están bien demostradas y documentadas las alteraciones a largo plazo en dientes, maxilar y mandíbula que se presentan en los niños que pasan mucho tiempo respirando por la boca.

Categóricamente el tratamiento definitivo es la cirugía de las adenoides. A pesar de que las adenoides han sido identificadas desde hace más de un siglo, nunca como ahora la cirugía es más efectiva y segura. La mejor opción para operar y retirar las adenoides es con la técnica endoscópica moderna y la resección electrónica que garantiza un retiro minucioso y una coagulación efectiva del sangrado.

Referencias:

Niedzielski, A., Chmielik, L. P., Mielnik-Niedzielska, G., Kasprzyk, A., & Bogusławska, J. (2023). Adenoid hypertrophy in children: a narrative review of pathogenesis and clinical relevance. BMJ paediatrics open, 7(1), e001710. https://doi.org/10.1136/bmjpo-2